Krzysztof “Vega” Góra (Polonia) se acerca a la meta de uno de los proyectos más ambiciosos en la escena de Atari 8-bits: la conversión de «Street Fighter II». Tras meses de trabajo, pruebas y ajustes, el port ya se encuentra en la recta final y acumula novedades que lo acercan cada vez más a la experiencia del arcade original, pese a las limitaciones de la plataforma.
Un añadido destacado es el efecto de fuego que aparece cuando los luchadores reciben los hadokens de Ryu y Ken, o el Psycho Crusher de M. Bison. Este detalle no solo aporta espectacularidad al combate, sino que reafirma la voluntad de Vega por reproducir los matices que hicieron legendario al título original de Capcom.
A esto se suman pequeñas animaciones en los escenarios que dotan de vida a cada duelo: el pollo que aletea en el escenario de Chun-Li; la bandera ondeando en el barco de Ken; la palmera que se mece en el de Sagat; o los monjes que celebran cada golpe en la arena de M. Bison. Incluso se han implementado "suelos" para mejorar la integración visual con la parte superior de la pantalla, logrando una mayor coherencia en la composición de cada fondo.
El trabajo de Nickolas “Gaspar” Arachovitis ha sido clave en esta fase. En el foro de AtariAge explicó las dificultades para mantener la perspectiva en el escenario de Ryu, donde algunos usuarios señalaron que los tablones de madera parecían desproporcionados respecto a los luchadores. Gaspar admitió que “existen muchos ports de este escenario con tablones enormes. El veteado de la madera luce muy bien, pero al ser una arena de lucha con mucha profundidad, se altera la escala de los personajes”.
También se ha trabajado en ajustes de color para la zona de combate, buscando un mayor contraste y evitando tonos rojizos o carne que dificultaban la visibilidad de los combatientes. Sin embargo, las limitaciones del hardware son claras: “los peleadores utilizan tres de los cuatro colores disponibles. Eso nos deja solo uno libre, que debe integrarse a la fuerza con los otros usados para el piso”, señaló Gaspar.
Entre las incorporaciones más recientes se encuentra la clásica escena de bonus, en la que el jugador debe destruir un vehículo a base de golpes. Aunque aún está en desarrollo, el nivel ya presenta un detalle curioso: la matrícula del coche incluye una referencia al eterno rival de los Atari XL/XE; un guiño que no ha pasado desapercibido para los seguidores.
Sobre los plazos, Vega ha sido claro en el mismo foro: “quiero terminar este juego lo antes posible”, escribió, subrayando que el proyecto atraviesa sus últimos compases. Sin embargo, aún quedan desafíos, entre ellos la posibilidad de una edición física. A la pregunta de si habrá un cartucho, respondió que “todavía es un problema fabricar un cartucho de 4 MB. Uno de 1 MB es sencillo, pero no de 4 MB. Aun así, si funciona, la copia física será publicada”.
Con estos avances, el port de «Street Fighter II» se consolida como uno de los desarrollos más complejos y sorprendentes jamás realizados en la plataforma. El resultado final promete no solo ser un logro técnico, sino también un hito en la historia contemporánea del Atari 8-bits.